
Solidaridad internacional con la huelga general en Italia
La Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas expresa su total apoyo a la movilización en Italia
Este 20 de junio, trabajadores y trabajadoras de diversas categorías en Italia realizan una huelga general, convocada por sindicatos y centrales combativas en respuesta a la profundización de la crisis social y económica en el país. El transporte público, los ferrocarriles y otros servicios esenciales deben detenerse, dando visibilidad a la indignación popular ante las políticas llevadas a cabo por el gobierno de extrema derecha liderado por Giorgia Meloni.
El contexto es de creciente inflación, contracción de la producción industrial, aumento del desempleo y la pobreza, además de la acelerada precarización de las condiciones laborales. Las reivindicaciones son claras: reajuste real de los salarios y las pensiones, ampliación de las inversiones en salud, educación y vivienda, y el fin de las políticas de austeridad que penalizan a los más pobres.
La huelga también conlleva una fuerte denuncia internacional. El movimiento sindical italiano condena la complicidad del gobierno de Meloni con el genocidio en curso contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza. Al igual que en otros países, incluido Brasil, la alianza con gobiernos responsables de crímenes de guerra, como el de Israel, representa una afrenta a los derechos humanos y a la justicia internacional. El movimiento obrero en Italia exige la ruptura de relaciones con el Estado sionista y el fin de la escalada militarista que, al mismo tiempo que financia la guerra, retira derechos a la población.
La Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas expresa su total apoyo a la movilización en Italia y refuerza el llamado a la solidaridad internacional. En todos los rincones del mundo, los gobiernos siguen priorizando los intereses del capital en detrimento de la vida y los derechos sociales. Nuestra respuesta debe ser de unidad, resistencia y lucha. Contra la explotación, la guerra y el genocidio, seguimos al lado de la clase trabajadora italiana y de todos los pueblos que enfrentan las consecuencias de este sistema que profundiza la desigualdad y la violencia.