Metro de São Paulo

Comunicado de las organizaciones miembros de la Red Internacional de Solidaridad y Lucha Sindical

En el último período, los trabajadores del metro han protagonizado varios enfrentamientos con el gobierno de Tarcísio [gobernador del estado de São Paulo], con tres huelgas y un paro laboral contra las concesiones, las privatizaciones y la externalización, contra el acoso moral y por los derechos de los trabajadores.

La respuesta del gobierno de Tarcisio fue antisindical, con despidos por motivos políticos, multas millonarias contra el sindicato Metroviários - São Paulo, procesos penales contra la presidenta del sindicato, Camila Lisboa, el despido del vicepresidente, Narciso Soares, y de otros dirigentes y miembros del equipo, así como advertencias contra nuestras luchas, avisos de huelga, entre otros ataques.

La categoría se mantuvo en movimiento, y en la lucha contra la privatización, así como en la resistencia a la implementación de un plan de fin de carrera, con la creación de un cargo que intenta socavar nuestras luchas y dificulta la contratación mediante licitación pública, la Companhia do Metropolitano de São Paulo volvió a utilizar prácticas antisindicales, al suspender al Director de Comunicación y Prensa de Fenametro, Alex Santana. Cabe mencionar que, unos meses antes, otro funcionario de Fenametro, Ricardo Senese, que contribuyó a la lucha contra la privatización de SABESP [transporte y tratamiento de agua], fue detenido junto con otros activistas y fue objeto de un proceso penal.

También hemos denunciado la persecución de los maquinistas de la línea 1, que se han unido al movimiento internacional de solidaridad con el pueblo palestino: cuando se hicieron una foto con la bandera palestina, 10 trabajadores recibieron una advertencia por escrito, revelando el carácter sionista de la dirección de la empresa y del actual gobierno de Tarcisio.

Más recientemente, otros dos activistas fueron absurdamente castigados por defender su propia vida como consecuencia de la escasez de personal que denuncian constantemente. Un intento de acallar sus voces.

Ante estos ataques al derecho de manifestación, al derecho de lucha y sobre todo al derecho de huelga, nuestras organizaciones denuncian las prácticas adoptadas por el gobierno de Tarcisio y la dirección del metro y apoyamos la lucha de los trabajadores del metro para anular todos los castigos, despidos, multas y ataques a los representantes de las organizaciones de clase.

También promovemos el «Manifiesto contra la persecución a los trabajadores del metro de São Paulo, sus organizaciones y sus dirigentes». En defensa del derecho de huelga y de la organización sindical», junto con otras organizaciones, parlamentarios, dirigentes sindicales e intelectuales, que consideramos parte de una fuerte campaña democrática en defensa del derecho de huelga.

¡Actuemos juntos! ¡Contra las concesiones, las privatizaciones y las deslocalizaciones! ¡Por el derecho a luchar!